Años 50

En 1952 don Antonio Caballo Jiménez dimitía por motivos de salud y le sucedía en el cargo un  insigne personaje de las Letras, don Pedro Palop Fuentes, académico de la Real Academia de Córdoba y de Bellas Artes de Málaga, así como pregonero de la Semana Santa de Córdoba.

Palop le daría en su corto pero importante mandato, una intensa trayectoria intelectual a la Corporación, reuniendo en su entorno a importantes intelectuales de la sociedad cordobesa. En la Semana Santa de 1953 el estreno más importante fue la marcha que compuso don Francisco Melguizo: “Paloma de Capuchinos”, con la que bautizaría de forma cariñosa a la imagen de Nuestra Señora. En julio de ese mismo año presentaba su dimisión don Pedro Palop, sucediéndolo en ese mismo mes don José Caballo Reyes, hijo de don Antonio Caballo Jiménez.

 En su empeño por continuar la obra comenzada por su padre, don José Caballo encontró numerosos obstáculos económicos, que no permitieron culminar su proyecto. Este momento en la Hermandad es recordado como una transición hacia un nuevo empuje que vino de la mano de don José María Montoto, entrando como Hermano Mayor en noviembre 1956. n

Se configuró una novedosa Junta de Gobierno, hubo una gran participación de la mujer en el seno de la Hermandad y se llevaría a efecto un ambicioso proyecto que habían tenido en mente los anteriores hermanos mayores: la salida desde un local en la Plaza de Capuchinos.